Hezbolá confirmó este sábado la muerte de su máximo líder, Hasán Nasralá, en un bombardeo israelí ocurrido el viernes en los suburbios del sur de Beirut, bastión del grupo proiraní. El anuncio se produjo horas después de que Israel declarara haber eliminado al jefe del movimiento islamista libanés.
“Sayed Hasán Nasralá se reunió con sus compañeros mártires (…) cuya marcha encabezó durante casi treinta años”, declaró Hezbolá en un comunicado oficial. La confirmación llegó más de 19 horas después del ataque israelí contra el cuartel general del grupo en un barrio densamente poblado de la periferia sur de Beirut.
El ejército israelí había anunciado previamente la muerte de Nasralá. “Hasán Nasralá está muerto”, afirmó Nadav Shoshani, portavoz militar, en la red social X. Según un comunicado militar, Ali Karake, comandante del frente sur de Hezbolá, y otros dirigentes del movimiento también perecieron en el ataque.
Nasralá, de 64 años, lideraba Hezbolá desde 1994 y era una figura poderosa y venerada en Líbano. Vivía en la clandestinidad desde hace años y sus apariciones públicas eran escasas.
El ataque forma parte de una campaña de bombardeos masivos iniciada por Israel contra Hezbolá en Líbano el lunes, tras un año de enfrentamientos transfronterizos. Israel afirma que busca restablecer la seguridad en su frontera norte y permitir el regreso de los desplazados a sus hogares.
Hezbolá, respaldado por Irán, había intensificado sus acciones contra Israel desde el inicio de la guerra en Gaza en octubre de 2023. El conflicto ha escalado en las últimas semanas, con cientos de muertos en ambos lados y miles de desplazados.