El Tribunal Federal de Justicia de Alemania rechazó la apelación de Irmgard Furchner, una mujer de 99 años condenada como cómplice en más de 10.000 asesinatos durante la Segunda Guerra Mundial. Furchner, quien trabajó como secretaria en el campo de concentración nazi de Stutthof, deberá cumplir una pena de dos años de prisión condicional.
El caso Furchner, considerado posiblemente el último de su tipo, se basa en un precedente legal establecido en 2011 que permite condenar a individuos por complicidad en asesinatos masivos simplemente por haber trabajado en campos de concentración.
“El tribunal está convencido de que Furchner apoyó deliberadamente el asesinato cruel de 10.505 prisioneros mediante su trabajo como taquígrafa en la oficina del comandante”, declaró un portavoz del Tribunal de Itzehoe, que emitió la sentencia original en diciembre de 2022.
La defensa de Furchner cuestionó su nivel de conocimiento y participación en los crímenes, argumentando su juventud en el momento de los hechos. Sin embargo, el tribunal mantuvo que su papel fue crucial en el funcionamiento del campo donde más de 60.000 personas perdieron la vida.
Este veredicto reafirma el compromiso de Alemania de perseguir los crímenes nazis, incluso décadas después, enviando un mensaje claro sobre la responsabilidad histórica y la justicia tardía.