La implementación del proyecto de autoconstrucción de vivienda en Montería, que busca beneficiar a familias vulnerables, se encuentra en un limbo debido a la falta de reglamentación por parte del Ministerio de Vivienda y a los elevados costos que implica para el municipio la adecuación de los lotes donde se desarrollaría la iniciativa.
Según declaraciones del alcalde Hugo Kerguelén, para que el proyecto pueda arrancar, la Alcaldía debe entregar lotes con servicios públicos listos para construir.
Esto implica una inversión de aproximadamente $10.500 millones de pesos para el relleno de los terrenos, de acuerdo con la cota de inundación, y para la dotación de servicios públicos.
Adicionalmente, el costo del lote ubicado entre Paz del Norte y Mocarí, que se ha contemplado para el proyecto, podría superar los $3.000 millones de pesos, según avalúos preliminares.
A estas inversiones se suma el subsidio que el municipio debe otorgar a los beneficiarios para la compra de materiales de construcción. El Ministerio de Vivienda ha propuesto que este subsidio sea equivalente a 40 salarios mínimos mensuales legales vigentes por lote.
Sin embargo, el principal obstáculo para el inicio del proyecto es la falta de reglamentación por parte del Gobierno nacional. “Cuál es el problema hoy, todavía no está regulado, no está reglamentado. La ciudad va a ser el piloto y venimos haciendo mesas de trabajo con el Ministerio de Vivienda, tenemos que pedirle facultades al Concejo para que esto sea una realidad y estamos trabajando en ello”, señaló el alcalde Kerguelén.
Aunque en su momento se anunció una visita de la ministra de Vivienda, Catalina Velasco Campuzano, a la ciudad para darle celeridad al proyecto y concretar acuerdos definitivos, hasta la fecha no se ha producido este encuentro. La demora en la reglamentación del programa y en la definición de los lineamientos técnicos y financieros está generando incertidumbre entre las familias que podrían beneficiarse de esta solución habitacional.
Fuentes consultadas por este medio coinciden que, si bien el modelo de autoconstrucción puede ser una alternativa viable para reducir el déficit habitacional, se requiere de una planeación rigurosa y del compromiso decidido de todas las partes involucradas. Sin una reglamentación clara y sin el apoyo financiero necesario, el proyecto corre el riesgo de quedarse en el papel.
Ante este panorama, la Alcaldía espera que el Ministerio de Vivienda agilicen los trámites y lleguen a acuerdos concretos para que el proyecto de autoconstrucción pueda convertirse en una realidad.