Montería. Los residentes de los Barrios Santander y Pastrana Borrero, que colindan con la sede de la Décima Primera Brigada del Ejército, realizaron una jornada de protesta en rechazo a la pretensión de la guarnición militar, de ubicar el puesto de control de acceso a la Brigada, enfrente del Liceo Guillermo Valencia, lo que perjudicaría la libre entrada a sus barrios.
Oscar Ignacio Benítez, Presidente de la Junta de Acción Comunal del Barrio Santander, indicó que la decisión los afecta, debido a que la entrada a sus barrios quedaría bloqueada y no podrán ingresar libremente a su sector.
“Hace mucho tiempo el Ejército ha querido adueñarse de la entrada de nuestro barrio, hecho que no aceptamos, ellos quieren colocar el arco con el puesto de control enfrente del Liceo, por ende no podremos ingresar a nuestro barrio y tocaría caminar un gran trayecto por una zona que en las noches es peligrosa”, indicó.
Adicionalmente, denunciaron que la única calle del barrio es utilizada como parqueadero público, obstaculizando el paso.
“Nosotros no podemos pasar ni en bicicleta, porque los carros de los proveedores de Indumil, y personas que llegan a realizar diligencias, parquean en ambas aceras de la calle”, indica Alex Londoño Nisperuza, residente del sector.
Por otra parte, denunciaron inconvenientes con el canal de aguas servidas que construyó la Brigada en asocio con la CVS, según ellos, es un foco de proliferación de mosquitos y animales ponzoñosos.
“De allí salen culebras, ratas y se nos metan a las casas, en repetidas ocasiones hemos pedido que nos solucionen ese problema pero hasta el momento, persiste”, afirmó el líder comunal.
Entre tanto el coronel Ulises Figueredo, comandante de la Brigada XI, sostuvo que el permiso para la instalación de esa estructura, ya se lo habían solicitado a la oficina de planeación municipal y esta lo había concedido.
Igualmente, afirmó, que el rector del colegio Guillermo Valencia también otorgó la aprobación para el mismo fin.
“Los controles van hacer los mismos, no se obstaculizará el paso ni nada por el estilo. Se decidió instalar allí el arco para que el espacio de la segunda garita no se notara sobrecargado, pero la comunidad no se va a ver afectada de ninguna manera”, aseveró el oficial.
