Montería. Según Javier Villareal, Superintendente Delegado para medidas especiales de la Supersalud; en 30 días el agente interventor deberá enviarles un plan de acción con las medidas para “revertir las situaciones que han venido dando al traste con la prestación del servicio”.
Se trabajará con base en una serie de indicadores técnicos determinados por el la entidad reguladora.
“Esta administración trabajará de manera técnica, toda la información será de público conocimiento para los usuarios, trabajadores, prestadores, medios de comunicación y red de veedurías”, explicó Villareal.
Añadió que desde el año 2013 los indicadores del San Jerónimo empezaron a decaer, y a pesar de los salvavidas financieros del Gobierno, no se notaban mejoras sustanciales en los mismos.