El concejal y médico de la ciudad de Montería, Ernesto Cáliz Martínez, reclamó condiciones de seguridad para el hospital San Jerónimo, cuyas deficiencias fueron puestas en evidencia con el rapto de una recién nacida a manos de una mujer que salió del centro asistencial sin problema alguno.
El cabildante conminó a las autoridades administrativas del centro asistencial y de los establecimientos médicos adoptar, y en otros casos, reforzar los esquemas internos de seguridad como lo exige la norma.
Los protocolos de seguridad internos deben proteger a pacientes y al personal que laboral, agregó.
El galeno llamó también la atención de la Alcaldía de Montería para la iluminación en los alrededores del hospital que en hora de la noche son espacios propicios para la delincuencia.