En la noche del jueves, comerciantes y ciudadanos de Montería realizaron un plantón en la Avenida Primera con Calle 28 para exigir una reducción en las tarifas de energía eléctrica. Durante la manifestación, que inició a las 6:30 PM y generó el cierre de la vía, los asistentes expresaron su inconformidad por los elevados cobros en los recibos de los últimos meses.
Luis Martínez, director de Fenalco regional Córdoba, advirtió que debido a los incrementos en las facturas de energía, 2 de cada 10 comerciantes han considerado cerrar sus negocios. “Mire, de 10 comerciantes, dos están pensando en cerrar su negocio y eso ya es una alerta peligrosa para la ciudad”, señaló Martínez durante el plantón.
Algunos manifestantes llevaron sus recibos de energía para evidenciar los aumentos desproporcionados. María Llanos Morales, residente del barrio La Granja, mostró una factura por $2,400,000 pesos correspondiente al mes de marzo.
“El mes pasado la factura llegó en $1,400,000 pesos. Es imposible pagar y aún faltan los otros recibos”, manifestó la afectada, quien aseguró no haber realizado cambios en su consumo habitual.
Liberto Reyes, veedor de servicios públicos domiciliarios, hizo un llamado a las empresas y al gobierno nacional para que revoquen las resoluciones que han permitido los incrementos.
“Las resoluciones de la CREG de la 108 para acá han dictado una cantidad de resoluciones que le han dado a las empresas facultades, dentro de esas está el cobro de lo que son las pérdidas técnicas y no técnicas, igualmente, lo que es la recuperación de las inversiones”, explicó Reyes.
Los organizadores del plantón anunciaron que continuarán con las manifestaciones hasta obtener una respuesta satisfactoria por parte de las autoridades y las empresas prestadoras del servicio. Asimismo, hicieron un llamado a la ciudadanía para que se sume a las protestas y exija tarifas justas y acordes a su capacidad de pago.
La problemática de los altos costos de la energía eléctrica ha generado preocupación entre los monterianos, quienes temen que esta situación desencadene en una crisis económica y social para la ciudad.
