Judicial. Tropas de la Décima Primera Brigada del Ejército Nacional llevaron a cabo una destacada acción que culminó en la ubicación y destrucción de un laboratorio ilegal destinado a la producción de clorhidrato de cocaína en la zona rural del municipio de Puerto Libertador.
Este complejo ilegal, construido de manera artesanal, se encontraba en una zona de influencia del Clan del Golfo, y su desmantelamiento ha generado un impacto económico significativo en esta organización criminal.
El laboratorio clandestino albergaba una serie de elementos relacionados con la producción de drogas, incluyendo 170 galones de gasolina, 100 kilogramos de hoja de coca, ACPM, amoníaco y diversos insumos líquidos y sólidos utilizados en el procesamiento del alcaloide.
Esta operación se llevó a cabo gracias a la información proporcionada por la inteligencia militar y ha tenido un fuerte impacto en las finanzas de la subestructura Rubén Darío Ávila del Clan del Golfo. El laboratorio tenía una capacidad de producción de 62,9 kilogramos de pasta base de coca, con un valor estimado de más de 250 millones de pesos colombianos al mes.