Defensa pide traslado a Valledupar de sindicados por triple homicidio, alegando amenazas en cárcel de Montería

Abogados advierten riesgos de seguridad y posibles represalias contra los procesados en Las Mercedes.
11 horas atrás

La defensa de los presuntos responsables del triple homicidio en Chimá solicitó el traslado de los procesados a la cárcel de máxima seguridad de Valledupar, argumentando amenazas contra la vida de los sindicados en el centro penitenciario Las Mercedes de Montería.

El abogado Lesmer Quintero, defensor de Cristian Petro Almanza y Juan Fernando Soto Garcés, alertó sobre posibles represalias contra sus defendidos. “Los comentarios que hacen los investigadores es que los esperan en la cárcel Las Mercedes con sed de venganza algunos grupos o personas”, manifestó durante la audiencia.

La juez del caso, aunque mantuvo la orden de reclusión en Montería, accedió a incluir una sugerencia al INPEC para que estudie la posibilidad de trasladar a los procesados a un centro de reclusión diferente, preferiblemente la cárcel de máxima seguridad de Valledupar.

“Atendiendo las peticiones de la defensa por la seguridad de sus defendidos, se hará la sugerencia al INPEC”, indicó la funcionaria judicial, aclarando que la decisión final sobre el lugar de reclusión corresponde a esta entidad.

Según la defensa, el tema de seguridad ya había sido discutido previamente con la Fiscalía. “Habíamos hablado que fueran trasladados a la cárcel de Valledupar, una cárcel de máxima seguridad donde pudiéramos adelantar este proceso que hoy nos ocupa”, señaló Quintero.

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El equipo defensor también solicitó tiempo adicional para sustentar el recurso de apelación contra la medida de aseguramiento, petición que fue negada por la juez, quien insistió en que la sustentación debía realizarse durante la misma audiencia, conforme lo establece la norma.

Los procesados enfrentan cargos por el homicidio del ganadero Esteban Urueta González y sus mayordomos Freddy Beleño Acosta y Gerardo Marzola Coronado, hechos ocurridos en la zona rural de Chimá en septiembre de este año.