Las intensas lluvias que azotaron al Bajo Sinú, este miércoles 26 de febrero, provocaron el desbordamiento de varios arroyos que desembocan en la Ciénaga Grande, inundando extensas áreas de cultivo de patilla en el municipio de Momil. Más de 250 agricultores han declarado pérdida total de sus cosechas, especialmente en la zona de El Pimental, que ya ha sido calificada como zona de desastre.
El arroyo Patico, uno de los principales afluentes de la región, se desbordó arrasando con decenas de hectáreas de cultivos que aún no habían sido cosechados. Las corrientes alcanzaron niveles sin precedentes, dificultando cualquier intento de rescate de la producción.
“Estamos haciendo todo lo posible para salvar nuestras cosechas, pero la fuerza del agua es impresionante. Si las lluvias continúan, perderemos todo nuestro trabajo y nuestros ingresos”, declaró un agricultor afectado mientras intentaba recuperar algunas patillas que flotaban en las aguas turbias.
Los campesinos afectados han solicitado urgentemente la intervención de la Alcaldía Municipal, pidiendo que funcionarios se acerquen a la zona para evaluar los daños y establecer medidas de apoyo inmediato
Para muchas familias, esta cosecha representaba su único ingreso del semestre, por lo que las pérdidas impactarán severamente en su capacidad de subsistencia.
Los agricultores más afectados son pequeños productores que carecen de seguros agrícolas y que habían invertido todos sus recursos en estos cultivos, esperando recuperar su inversión con la venta del producto en los mercados regionales durante la temporada alta.
