El consumo de cigarrillos ilegales en Córdoba alcanzó el 79% en 2024, un salto dramático desde el 31% registrado en 2023, según reveló un estudio de Invamer contratado por la Federación Nacional de Departamentos para medir el impacto del contrabando en el territorio cordobés.
Este incremento de 38 puntos porcentuales convierte a Córdoba en uno de los departamentos más afectados por el comercio ilegal de tabaco en el país.
“El 79% de los cigarrillos consumidos en Córdoba son ilegales”, confirmó Alonso Carlos Angulo Fernández, jefe del programa anticontrabando de la Federación Nacional de Departamentos.
La cifra representa una pérdida directa de 55.000 millones de pesos anuales para las arcas departamentales, recursos que deberían financiar educación, salud y deporte a través del impuesto al consumo.
Invamer realizó el estudio exclusivamente sobre cigarrillos, lo que deja por fuera otros productos como cerveza, licores, vinos, aperitivos, whisky y aguardientes. “No me quiero imaginar cuánto debe dejar de percibir el departamento por estos otros productos”, expresó el funcionario.
Las bandas criminales, que se financian con el contrabando, aprovechan la cultura festiva de la Costa Atlántica para intensificar sus operaciones. “Los costeños disfrutamos las ferias y fiestas, y esto incrementa el consumo de cigarrillos y licor”, explicó Angulo.
El departamento depende en un 64,25% del impuesto al consumo, lo que convierte estas pérdidas en un golpe severo para el presupuesto destinado a servicios públicos esenciales.
Para combatir esta problemática, la Federación mantiene operativos permanentes con la Secretaría de Hacienda y fuerzas militares. Recientemente incautaron 200.000 cajetillas valoradas en 300 millones de pesos.
El Plan Caribe anticontrabando, lanzado hace tres meses en Montería, busca revertir estas cifras a través de campañas de sensibilización y operativos de control en toda la región.