Una potente explosión en el puerto Shahid Rajaee, principal terminal marítima de Irán provocó la muerte de al menos 40 personas y dejó aproximadamente 1.200 heridos, según confirmó la televisión estatal iraní. El incidente ocurrió cerca de la ciudad de Bandar Abbás, ubicada a más de 1.000 kilómetros al sur de Teherán.
“La cifra de fallecidos asciende a 40, mientras que el número de lesionados es de al menos 1.200”, indicó el reporte oficial tras el siniestro que afectó a esta crucial infraestructura portuaria por donde transita el 85% de las mercancías del país.
Esmaeil Malekizadeh, funcionario regional del puerto, precisó que “la explosión ocurrió en una parte del muelle del puerto Shahid Rajaee”, aunque las causas exactas aún se encuentran bajo investigación por parte de las autoridades competentes.
La oficina de aduanas de la instalación portuaria señaló que “la explosión se debió probablemente a un incendio en un depósito de materiales químicos”, versión que contrasta con el comunicado emitido por la Compañía Nacional Iraní de Distribución de Productos Petroleros, entidad estatal que descartó cualquier vínculo del suceso con sus operaciones.
“La explosión de Shahid Rajaee no tiene relación con refinerías, tanques de combustible, complejos de distribución ni oleoductos”, afirmó la empresa petrolera en su declaración oficial, descartando así la participación de infraestructura energética en el desastre.
El puerto afectado se sitúa estratégicamente junto al estrecho de Ormuz, punto neurálgico para el comercio marítimo global y zona de alta importancia geopolítica. Bandar Abbás, ciudad adyacente al puerto, alberga la base principal de la Marina de Guerra iraní y representa un enclave fundamental para la seguridad y el comercio del país persa.
Los equipos de emergencia continúan trabajando en la zona mientras avanzan las investigaciones para determinar con precisión el origen de esta tragedia que ha impactado severamente una de las infraestructuras más vitales para la economía iraní.
