Las redes sociales siguen ganando peso e importancia y su cima no parece tener techo, al menos en los próximos años, por eso es importante darle un buen manejo y ser responsables con los contenidos que compartimos.
- Subir fotos con poca ropa: es muy importante que sepas que una vez subes algo a las redes sociales es público y permanecerá por mucho tiempo ahí. Así que es necesario que entiendas que tú misma imagen se podrá ver afectada.
- Publicar tus emociones: sé prudente con la que compartes en tus redes. Tus relaciones son de carácter privado y no le interesan a todos.
- Utilizar fotos, o publicaciones ofendiendo: No existe nada más desastroso e incómodo para los demás que la burla. Burlarse de los demás no te hace ver más interesante, ni más popular, simplemente te hace ver como un ser irrespetuoso y con malas intenciones. Recuerda que tú también puedes ser víctima de esto, así que antes de hacer cualquier cosa piensa y luego si actúa. Como dice el adagio popular “No le hagas a los demás, lo que no te gustaría que te hicieran a ti”.
- Contar todo lo que haces: es bueno que la gente sepa que disfrutas de tus momentos familiares y con amigos, pero todo en exceso es malo. En algunas ocasiones resulta muy molesto para los demás ver que estás en el gimnasio, comiendo, de compras o en un momento romántico con tu pareja. Recuerda la prudencia hace verdaderos sabios. A mucho ni siquiera les interesa lo que pase a tu alrededor.
- Evita ser morbosa. la morbosidad no solo implica una temática sexual. También las enfermedades, la agresión a animales y a personas, desencadenan un sinnúmero de comentarios y críticas que resultan ser “pesadas” para quien te pueda tener de ´amigo´ en las redes sociales. Evita este tipo de cosas, ante todo la discreción y la buena fe.