El niño colombiano que conquistó al Tigre

No se trata de uno de los grandes artistas de Nariño. Sandro Emmanuel Cerón tiene solo 11 años y es uno de los tantos colombianos que sufre por la lesión del futbolista del AS Mónaco y de la Selección Colombia, Radamel Falcao García. Y ese dolor –causado por la rotura del ligamento cruzado anterior de su pierna izquierda– lo plasmó con una pintura titulada Fe. En la obra, que mide 100 centímetros de largo por 90 de ancho, aparece el delantero samario sentado en la gramilla recibiendo la ayuda de Jesús, que le extiende la mano para que se levante
11 años atrás
Sandro Cerón pintó un cuadro sobre la lesión del delantero. Sueña con entregárselo personalmente.
Sandro Cerón pintó un cuadro sobre la lesión del delantero. Sueña con entregárselo personalmente.

No se trata de uno de los grandes artistas de Nariño. Sandro Emmanuel Cerón tiene solo 11 años y es uno de los tantos colombianos que sufre por la lesión del futbolista del AS Mónaco y de la Selección Colombia, Radamel Falcao García.

Y ese dolor –causado por la rotura del ligamento cruzado anterior de su pierna izquierda– lo plasmó con una pintura titulada Fe.

En la obra, que mide 100 centímetros de largo por 90 de ancho, aparece el delantero samario sentado en la gramilla recibiendo la ayuda de Jesús, que le extiende la mano para que se levante y siga jugando. Alrededor están las tribunas con los colores amarillo, azul y rojo y al fondo sobresale una pancarta que dice ‘Fuerza, ‘Tigre’ Falcao’.

“El mensaje que quiero enviar es que si confiamos y tenemos fe en Dios todo es posible, no solo pidiendo su ayuda, sino que también agradeciendo por todo lo que nos da”, expresa el estudiante de grado séptimo en la Institución Educativa Municipal El Encano, en zona rural de Pasto.

El menor confiesa que le dio “mucha tristeza” cuando el futbolista se lesionó en un partido en Francia. Colombia y la Selección lo necesitan mucho, espero su pronta recuperación”, dice el niño, quien no le quita la mirada a su trabajo colgado en la sala de una modesta casa alquilada por sus padres, a casi un kilómetro de la hermosa laguna de La Cocha.

Tras terminar la pintura el 29 de marzo pasado, Sandro confiesa que su primer sueño ya se hizo realidad, el 9 de Abril el futbolista reconoció su trabajo a través de su cuenta de Twitter.

“Yo me sentí muy feliz porque, por fin, Falcao había visto mi cuadro, yo no me lo esperaba… No sabía qué hacer en ese momento”, dice el pequeño artista, quien ahora sueña con que algún día le pueda hacer entrega personalmente del cuadro al delantero colombiano, Sandro dice que tendrá mucha fe de que va a jugar en el Mundial. Y además de ser humilde tiene mucha fe.