Los cultivos de marañón afectados por el reciente incendio en Chinú necesitarán entre dos y tres años para recuperarse completamente, según informó Fernando Hoyos Martínez, representante legal de Asomasab.
El siniestro, ocurrido el pasado sábado 22, arrasó con 33 hectáreas de cultivos pertenecientes a 11 pequeños productores de la zona.
“Para restablecer los cultivos se requiere un tiempo bastante considerable. Yo pienso que por ahí en 2 o 3 años se logra haciéndole las labores drásticas”, explicó Hoyos Martínez, quien agregó que la recuperación dependerá fundamentalmente “de la afectación que tengan los árboles a nivel celular”.
El representante de la Asociación de Productores de Marañones de La Sabana confirmó que actualmente realizan evaluaciones con los asociados afectados para establecer con precisión el nivel de daño en cada árbol, lo que permitirá desarrollar un plan de intervención específico para cada zona.
El incendio afectó cuatro veredas: Pisa Bonito, Carbonero, Garbado y Bellavista, importantes áreas productivas dentro de las 200 hectáreas que maneja la asociación, conformada por 53 productores locales.
Este desastre golpea al sector marañonero cuando apenas intentaba recuperarse de los estragos causados por el fenómeno de La Niña durante el año anterior. “El año pasado cayeron más de 6000 mm de lluvia, cuando el promedio anual son entre 800 y 1200 mm”, señaló Hoyos Martínez.
Las lluvias excesivas ya habían reducido la producción en un 78%, pasando de entre 5 y 7 toneladas de semillas normalmente procesadas a solo 22 toneladas el año pasado, lo que dejó un margen de retorno económico muy bajo.