Aunque se había advertido con antelación que se iban a presentar dificultades con la llegada de las lluvias en el punto conocido como Cara de Gato, que necesitaba reforzarse, así como en otras zonas del departamento de Córdoba, el Gobierno Nacional no reaccionó a tiempo y hoy se están viendo las consecuencias.
Así lo dijo el gobernador de Córdoba, Erasmo Zuleta, en una reunión de coordinación entre el Gobierno Nacional y autoridades departamentales, propiciada por la Federación Nacional de Departamentos.
El mandatario departamental puso en evidencia que desde hace varios meses se anticiparon a las afectaciones que causaría la llegada de las lluvias, pero no hubo respuesta ni reuniones que permitieran articular los esfuerzos para mitigar los impactos, señaló el mandatario.
Sostuvo que ese tipo de reuniones se convierten en estériles si no hay de verdad compromisos de inversiones que se requieren para disminuir el riesgo.
Zuleta fue más allá y aseguró que las afectaciones por lluvias en el departamento de Córdoba no solo afectan al sector agropecuario, sino también a otras áreas como el transporte, la educación, la salud y la infraestructura del departamento.
“Hoy nos toca actuar en medio de la emergencia. Siempre será mucho mejor trabajar en la prevención del riesgo y no en la mitigación del desastre”, dijo el mandatario.
En ese evento, Zuleta pidió al gobierno del presidente Gustavo Petro compromisos serios para atender la emergencia que se registra, especialmente en el municipio de Ayapel, con ocasión de la ruptura del dique en Cara de Gato y en otros municipios donde se han registrado inundaciones que dejan más de 1.500 familias damnificadas y miles de hectáreas de cultivos perdidas.
