La vereda Sierra Chiquita, zona rural del municipio de Montería, enfrenta una creciente crisis de seguridad que ha llevado a sus habitantes a organizarse en patrullas comunitarias. El martes 21 de enero, aproximadamente 30 residentes iniciaron rondas nocturnas ante la ausencia de respuesta policial efectiva.
La comunidad denuncia una serie de incidentes delictivos ocurridos la semana pasada, incluyendo el hurto de un televisor en horas del mediodía, el robo de 2.6 millones de pesos destinados a una matrícula universitaria, la sustracción de una motocicleta en el sector cercano al batallón, y el asalto a varios jóvenes a orillas del río, a quienes despojaron de sus teléfonos celulares.
Los habitantes expresan su frustración ante la falta de respuesta de las autoridades, señalando que, pese a estar dentro del perímetro urbano, la policía se niega a atender sus llamados, argumentando que la zona no corresponde a su jurisdicción. La comunidad exige ser incluida en el cuadrante del barrio Santa Fe para garantizar la cobertura policial.
“Nos toca armarnos con garrotes y lo que tengamos a mano porque la delincuencia no da tregua y el Estado no nos está protegiendo”, manifestó un representante de la comunidad, evidenciando la desesperación de los habitantes ante la situación.