Córdoba. La Policía Ambiental y la Corporación Autónoma Regional de los Valles del Sinú y del San Jorge (CVS) mantienen una cruzada en contra de quienes trafican con la fauna silvestre, alterando los ecosistemas, sobre todo, contra quienes cazan de manera furtiva hicoteas para venderlas durante la Semana Santa.
En Córdoba son más de 466 las tortugas que se han decomisado y que actualmente se encuentran en un proceso de hidratación y rehabilitación, para devolverlas a las diferentes cuencas, después de la Semana Santa.
La información se la suministró a LARAZÓN.CO el coordinador del Centro de Atención y Valoración de Fauna de la CVS, Alberto Muñoz, quien aclaró que, las hicoteas deben retornar a sus humedales de origen, para preservar su paquete genético y evitar problemas como el albinismo.
Es importante destacar que la preservación de la diversidad genética de las tortugas es crucial para mantener la salud y la diversidad de la población, añadió.
Al devolver las tortugas a sus sitios de origen, se asegura que no se mezclen con otras poblaciones y que mantengan sus características genéticas únicas.