La Auditoría General de la República hizo un llamado a la ciudadanía de Córdoba y Sucre para denunciar las numerosas obras públicas inconclusas, conocidas como “elefantes blancos”, que se encuentran abandonadas en varios municipios de estas regiones. Algunas de estas obras datan de 1991, representando una deuda histórica con las comunidades locales.
Dentro de los municipios cordobeses identificados como focos de obras inconclusas, se destacan Tierralta, Valencia y Montería, afirmó Vilma Quiroz Alemán, gerente de la Auditoría Regional.
En estos lugares, proyectos de infraestructura que deberían beneficiar a la población han quedado estancados, convirtiéndose en un lastre para el desarrollo y el bienestar de las comunidades.
Ante esta realidad, la Auditoría General insta a los ciudadanos de estos municipios a alzar su voz y denunciar estas obras inconclusas.
“Solo a través de la participación activa de la comunidad y el control social se podrá exigir la culminación de estos proyectos y garantizar el aprovechamiento efectivo de los recursos públicos destinados al desarrollo de Córdoba”, expresó.
