De lo que se salvó la bahía de Cispatá

       Córdoba es uno de los tesoros con mayor biodiversidad de Colombia. El departamento cuenta con una ubicación geográfica privilegiada: limita al norte con el Mar Caribe y, en su interior,  resguarda el parque natural del Nudo de Paramillo, donde nacen los ríos San Jorge y Sinú, éste último, emblema del departamento. Bahía de Cispatá, pertenece a Córdoba y a la tradición mágica, propia, de un pueblo de pescadores de San Antero. En las últimas semanas, Córdoba, también conocido como la...


Córdoba es uno de los tesoros con mayor biodiversidad de Colombia. El departamento cuenta con una ubicación geográfica privilegiada: limita al norte con el Mar Caribe y, en su interior,  resguarda el parque natural del Nudo de Paramillo, donde nacen los ríos San Jorge y Sinú, éste último, emblema del departamento.

Bahía de Cispatá, pertenece a Córdoba y a la tradición mágica, propia, de un pueblo de pescadores de San Antero.
Bahía de Cispatá, pertenece a Córdoba y a la tradición mágica, propia, de un pueblo de pescadores de San Antero.

En las últimas semanas, Córdoba, también conocido como la capital ganadera de Colombia, fue el foco de los medios de comunicación y gremios ambientalistas del país. Una licencia ambiental otorgada es el centro. La Corporación Autónoma Regional de los Valles del Sinú y del San Jorge, CVS,  le dio luz verde a la Sociedad Portuaria Gráneles del Golfo S.A para adelantar la construcción de un puerto que impactaría el Distrito de Manejo Integrado de la Bahía de Cispatá en el municipio de San Antero.

La polémica surge por la preocupación manifiesta de ambientalistas, administraciones municipales y ciudadanos. El ecosistema de manglar y una especie como el caimán aguja, estarían en riesgo. Así lo denunció el portal especializado en temas ambientales Natural Press.

La zona de manglares en mejor estado de conservación del país se encuentra en la Bahía de Cispatá.
La zona de manglares en mejor estado de conservación del país se encuentra en la Bahía de Cispatá.

Impacto ambiental que ocasiona la construcción de un puerto:

Una instalación portuaria asalta, habitualmente, grandes superficies de terreno, la construcción de un puerto impacta, considerablemente, el paisaje y las especies naturales existentes. Las playas, costas rocosas, zonas de caña, manglares u otras áreas de ribera son artificialmente afirmadas y edificadas, nivelando y sellando las superficies.

El impacto ambiental de los puertos marítimos es, por regla general, considerable. Originalmente la construcción, reforma o ampliación de instalaciones (tanto infraestructura como superestructura) del puerto marítimo, y el funcionamiento de todas las instalaciones portuarias, las industrias, los servicios y los sistemas de transporte (tanto acuáticos como terrestres) son los factores protagonistas de la afectación.

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Una mirada a los manglares en la Bahía de Cispatá en San Antero – Córdoba – Colombia.
Manglares que crecen en donde se mezcla el agua dulce del río con la salada del mar.
Calidad HD.

Vídeo: cortesía de Terramal Realtor

La construcción de los puertos marítimos afecta todo: el agua, el suelo, el aire, la flora, la fauna y al ser humano.

Según un informe de Estrucplan Consultora S. A. asentada en un servicio multidisciplinario que une el análisis de la problemática del microclima laboral y del medio ambiente estas causas impactan directamente sobre estos sectores:

Construcción nueva Agua
Reforma Suelo
Ampliación Aire
Funcionamiento Fauna y flora
Instalaciones Agua y Suelo
Sistemas Personas

Figura tomada de: www.estrucplan.com

El origen del impacto ambiental por la infraestructura y superestructura es, en primer lugar, en la instalación portuaria, considerada como conjunto de todas las estructuras acuáticas y terrestres destinadas al tráfico naval, así como a la actividad de carga y descarga. En los establecimientos industriales que, como medidas infraestructurales estrechamente vinculadas en la mayoría de los casos a los puertos marítimos, y destinadas a la transformación o mejora de mercancías o materias primas, provocan con su instalación alteraciones de las condiciones del entorno natural, por lo que deben valorarse como impactos sobre la naturaleza y el paisaje.

Los manglares de la Bahía de Cispatá son uno de los ecosistemas más importantes del Caribe Colombiano.
Los manglares de la Bahía de Cispatá son uno de los ecosistemas más importantes del Caribe Colombiano.

En cuanto a la parte de actividades los impactos ambientales proceden de las actividades portuarias, como el tráfico naval, las operaciones de carga, descarga, almacenamiento, transporte, suministro, disposición de residuos, mantenimiento o reparaciones y de todas las actividades de transformación y mejora que se desarrollan en la zona industrial adyacente.

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Todo esto implica alteraciones del entorno natural y de las condiciones de vida, por lo que pueden ejercer influencia sobre el ser humano, los animales, la naturaleza y el paisaje.

Más de 27 mil hectáreas fueron declaradas como Distrito de Manejo Integrado y ordenadas por la CVS y el INVEMAR en el año 2008, con el fin de darle a las comunidades la posibilidad de hacer un uso sostenible sobre un área de ecosistemas estratégicos para el caribe y la región, que hoy cuentan con más del 99% de los manglares de Córdoba.
Más de 27 mil hectáreas fueron declaradas como Distrito de Manejo Integrado y ordenadas por la CVS y el INVEMAR en el año 2008, con el fin de darle a las comunidades la posibilidad de hacer un uso sostenible sobre un área de ecosistemas estratégicos para el caribe y la región, que hoy cuentan con más del 99% de los manglares de Córdoba.

En Cispatá, “el puerto podría significar el ingreso de especies invasoras y la pérdida de biodiversidad. Además de disminuir la capacidad de los manglares para amortiguar las tormentas y la erosión costera”, según informó la bióloga marina con Ph. D. en Ecología y Medio Ambiente, Sandra Vilardy, en un informe de El Espectador.

“La actividad naviera es la principal vía de entrada de especies invasoras en el mundo y puede ser un potencial de afectación a los sistemas locales. Así mismo, los suelos asociados a los bosques de manglar son muy importantes para la descomposición, cuando hay accidentes con los buques, que son muy comunes, ya sea porque caiga combustible al agua o carbón, estas áreas se vuelven altamente contaminadas, se taponan y muchas terminan siendo zonas muertas”, añadió la experta.

Caimán Aguja. Foto tomada de Natural Press.
Caimán Aguja. Foto tomada de Natural Press.

Destacamos:

Después de que los alcaldes de Lorica, San Antero y San Bernardo del Viento en el departamento en Córdoba y el alcalde del municipio de Coveñas en el departamento de Sucre, Juntas de acción comunal y organizaciones ambientalistas manifestaron públicamente su desacuerdo con la licencia otorgada; la CVS, informó a través de un comunicado poco argumentado que después de “hacer una revisión minuciosa al proceso de otorgamiento de licencia ambiental a la Sociedad Portuaria Graneles del Golfo S.A., con ocasión de la solicitud de revocatoria presentada por un ciudadano, se ha expedido en el día de hoy la Resolución No. 2-2246, a través de la cual se procedió a revocar la misma”.

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Lo curioso es que, como lo informó la Agencia Natural Press, sea “la Corporación quien otorgó la licencia ambiental, la misma que, por presiones de las comunidades y los medios, la revoque”, según el portal, “es reconocer su propio error, es evidenciar que la licencia fue otorgada sin los debidos y minuciosos análisis sociales, económicos y ambientales por parte de esa autoridad”.

En este programa se hizo la denuncia que dio origen a la revocatoria de la licencia ambiental para la construcción de Puerto Gráneles
Natural Press Radio

Lecciones aprendidas de este suceso

De acuerdo con el investigador y sociólogo, Víctor Negrete, estas son las lecciones aprendidas de este hecho, que hubiese podido afectar a la zona de manglares en mejor estado de conservación en el país.

  1. La responsabilidad social de los medios de comunicación: «desde el primer momento en que se dio a conocer que se había otorgado una licencia para que se construyera un puerto en la bahía de Cispatá, algunos funcionarios y medios de comunicación, de inmediato replicaron y fueron altavoz de estas opiniones».
  2. El compromiso debe ser de todos: «estos hechos deben importarnos a todos. «Cualquier obra que se presente en el departamento debe presentarse, analizarse y discutirse con todos los sectores».
  3. La CVS debe ser más responsable y los cordobeses los primeros veedores: «esta licencia la aprobaron en diciembre de 2014. Es decir, año y medio después es que se conoce». 

 

*Especiales La Razón