La Universidad de Córdoba ha logrado expandir su presencia y el impacto de su investigación científica a diversas regiones de Colombia, alcanzando una cobertura en 14 departamentos del territorio nacional.
Así lo reveló el rector Jairo Torres Oviedo durante su rendición de cuentas sobre la vigencia 2023, donde destacó los avances en este campo como uno de los principales logros institucionales.
De acuerdo con lo expuesto, equipos de investigadores del alma máter cordobesa han desarrollado proyectos y transferidos conocimientos en zonas como el Caribe, el Pacífico, la región Andina, la Orinoquía y la Amazonía, abarcando casi la mitad de la geografía colombiana.
“Nuestra investigación está resolviendo problemas, está transformando los territorios y está permitiendo que las comunidades mejoren sus condiciones de vida. Ese es un indicador de que vamos por el camino correcto”, enfatizó el rector Torres al presentar los resultados de la vigencia anterior.
Esta creciente visibilidad nacional ha fortalecido la credibilidad y reputación de la institución, al punto de convertirla en un referente pionero en ciertas líneas de estudio para el país. Tanto instituciones públicas como privadas han acudido a la experticia de la Universidad de Córdoba para desarrollar trabajos conjuntos.
Entre los aspectos que han posibilitado este alcance investigativo, el rector destacó el fortalecimiento de los semilleros de investigación, la consolidación de centros e institutos especializados, una política de internacionalización que promueve la movilidad académica, así como el incremento de la oferta de programas de maestría y doctorado enfocados en la generación de nuevo conocimiento.
Con más de 20 maestrías y 7 programas doctorales en funcionamiento, la Universidad de Córdoba ha sentado las bases para seguir impulsando la investigación científica como eje misional y como factor clave para su visibilidad, posicionamiento en rankings nacionales e internacionales, y aporte al desarrollo regional.
La meta, según las perspectivas rectorales, es continuar esta senda de maduración del conocimiento a través de la creación de condiciones propicias, la búsqueda de mayores recursos y la consolidación de políticas enfocadas en mantener la pertinencia social de la investigación desarrollada.
