El ingrediente secreto, es sonreírle a la vida

Montería. Sonreírle a la vida, ese es el ingrediente secreto que Yasmina Sotomayor Berrío le pone a las recetas a la hora de preparar sus dulces tradicionales. Esta risueña mujer monteriana dice que heredó el arte de preparar dulces de sus ancestros, pues esta es una práctica que se realiza en su familia desde muchas generaciones antes que ella. “A mí siempre me ha gustado preparar dulces. Este bonito arte me ha permitido viajar por diferentes ciudades del país, e incluso he sido invitada a exponer en Europa, pero no he podido asistir por falta de recursos”, dice sin dejar
8 años atrás

Montería. Sonreírle a la vida, ese es el ingrediente secreto que Yasmina Sotomayor Berrío le pone a las recetas a la hora de preparar sus dulces tradicionales.

Esta risueña mujer monteriana dice que heredó el arte de preparar dulces de sus ancestros, pues esta es una práctica que se realiza en su familia desde muchas generaciones antes que ella. “A mí siempre me ha gustado preparar dulces. Este bonito arte me ha permitido viajar por diferentes ciudades del país, e incluso he sido invitada a exponer en Europa, pero no he podido asistir por falta de recursos”, dice sin dejar de sonreír.

“En este festival del dulce estoy participando con 18 variedades de dulce líquido y tengo más, lo que pasa es que no me caben todos aquí. También traigo dulce sólido para los gustos variados”, manifiesta.

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Gran variedad de dulces típicos de Semana Santa, se encuentran en el festival dulce tradición.

Haciendo alarde de su veteranía en el oficio, Yasmina asegura que no hay dulce barato. La preparación de un dulce, sin importar el sabor, es costosa. Prepararlo requiere de una inversión considerable, en especial si la persona comparte con los amigos y vecinos, como se hace tradicionalmente.

Sin embargo Yasmina agrega que no todo está perdido si de economizar se trata. “La gente en la casa puede usar el ñame. Ese es un dulce que se hace rápido y el ingrediente principal se puede conseguir en cualquier tienda o con un carretillero”.

Esta mujer le agradece a Dios que todos los dulces que prepara se venden en su totalidad. “El dulce de coco es el que más le gusta al público en general. Pero para los hombres, el favorito es el de mongo mongo, porque dicen que ese es afrodisiaco”, Yasmina suelta una carcajada mientras se choca las manos contra los muslos.

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yasmina-02Cuenta Yasmina que “el que este sea un arte tradicional, no lo hace menos riesgoso. Aquí también se pueden sufrir lesiones, no solo una quemadura. El humo de la leña utilizada en los fogones, puede causar graves afecciones en los pulmones y los ojos. Lesiones que se han vuelto ya típicas entre las mujeres de mi familia”, puntualiza.

Yasmina Sotomayor Berrío es una de las exponentes del Festival Dulce Tradición, realizado por la Alcaldía de Montería, en el Parque Simón Bolívar, frente a la Catedral San Jerónimo, en la calle 27 y 28 con carreras 3, pleno centro de la ciudad.