San Antero, Córdoba, se encuentra sumido en una grave crisis por la falta de agua potable, situación que se ha agudizado en los últimos 15 días y que amenaza con empañar la temporada turística de Semana Santa. Imágenes aportadas por fuentes locales revelan cómo los habitantes del municipio se ven obligados a recurrir a un pozo ubicado en las entradas de la localidad para abastecerse del preciado líquido.
“No hay agua en San Antero, definitivamente. Estas situaciones críticas hacen que la gente tenga que venir hasta aquí para buscar agua en partes donde no ha llegado. Es una triste realidad de los sananteranos hoy, haciendo cola para sacar agua de aquí”, comentó un residente afectado por la crisis.
Ante la falta de suministro por parte de la empresa de servicios públicos, los habitantes de San Antero se han visto en la necesidad de transportar agua en carretillas, tanques y pimpinas desde el pozo hasta sus hogares. “Tenemos que ir a buscar agua al pozo porque la empresa está haciendo fiesta y no se preocupa por el agua”, denunció otro ciudadano.
La situación se torna especialmente compleja a pocos días del inicio de la Semana Santa, una época de alta afluencia turística para el municipio. La falta de agua potable no solo afecta a los residentes, sino que también podría generar un impacto negativo en la llegada de visitantes y en la economía local, que depende en gran medida del turismo.
Ante la prolongada ausencia de soluciones por parte de las autoridades y la empresa de servicios públicos, los ánimos en San Antero se encuentran caldeados. La comunidad ha amenazado con bloquear las vías de acceso al municipio si no se toman medidas urgentes para restablecer el suministro de agua potable.
La alcaldía de San Antero y la empresa de servicios públicos han guardado silencio hasta el momento, mientras los habitantes exigen respuestas y acciones concretas para enfrentar esta crisis que vulnera su derecho fundamental al acceso al agua potable.
Se espera que en las próximas horas se convoque a una reunión de emergencia entre las autoridades municipales, la empresa de servicios públicos y representantes de la comunidad para buscar soluciones inmediatas y evitar que la situación se agrave aún más en vísperas de la temporada turística de Semana Santa.
