Un grupo armado perpetró un violento atentado contra las instalaciones de la Concesión Autopista del Río Grande en el municipio de Pelaya, Cesar, durante la madrugada del 26 de mayo.
Los atacantes ingresaron a la fuerza, incendiaron 33 equipos de construcción y agredieron a dos trabajadores de seguridad en un acto que pone en riesgo la continuidad de una de las obras viales más importantes para la conectividad nacional.
El ataque ocurrió cerca de las 2:40 a.m. en la Unidad Industrial ubicada en territorio cesarense. Los criminales destruyeron maquinaria esencial para la ejecución del proyecto: mezcladoras de concreto, excavadoras, vibrocompactadores, camabaja, dobletroque, carros tanque, cargadores, piloteadoras, trituradoras y vehículos utilitarios. Dos miembros del personal de seguridad resultaron heridos durante el ataque.
La Concesión Autopista del Río Grande, junto con sus socios KMA Construcciones y Grupo Ortiz, condenó enérgicamente el acto criminal y expresó solidaridad con los trabajadores afectados. La empresa calificó el ataque como una amenaza directa al desarrollo económico del país y a la estabilidad laboral de cientos de familias.
La Troncal del Magdalena 2, proyecto del cual forma parte este corredor vial, representa una esperanza de conectividad que estuvo abandonada durante años. Los responsables del proyecto señalan que este atentado constituye uno de los más graves contra la infraestructura vial en la historia reciente de Colombia.
La concesionaria exigió al Gobierno Nacional presencia estatal efectiva en el territorio y respuestas concretas para garantizar la seguridad de quienes trabajan en la obra. “No puede haber infraestructura sin garantías de seguridad. No puede haber desarrollo sin presencia estatal. Y no puede haber silencio institucional”, declararon los directivos.
Las autoridades competentes investigan los hechos mientras la empresa evalúa los daños y planifica la continuidad del proyecto vial que conectará importantes centros urbanos del país.
