La tragedia que devastó el sector de Granizal, en la frontera entre Bello y Medellín, ya cobra once vidas después de que las autoridades encontraran un nuevo cuerpo en jurisdicción de Medellín este miércoles.
Los equipos de rescate trabajaron sin descanso durante toda la noche y madrugada para localizar a las 15 personas que permanecen desaparecidas tras el alud que sepultó un barrio completo en la madrugada del martes 24 de junio.
Las diez víctimas anteriores corresponden a siete hombres y tres mujeres. Los organismos de emergencia mantienen sus operaciones con más de 200 personas desplegadas en el terreno, aunque las labores se complican por la enorme cantidad de lodo acumulado y la inestabilidad del suelo.
La Alcaldía de Bello reportó que 1.300 personas necesitan albergue temporal tras perder sus hogares. Las familias damnificadas se distribuyen en cinco centros de atención: Junta de Acción Comunal Oasis de Paz, piscina de Euclides, Fe y Alegría Grijelmo, barrio Zamora, Casa Betania y San Juan de Luz.
Los hospitales atienden a ocho personas heridas por el desastre natural que ocurrió alrededor de las 3:00 de la madrugada del martes, cuando los residentes sintieron lo que describieron como “un temblor de tierra muy fuerte”.
