EFE| Al menos 35 personas murieron hoy, entre ellas 17 militares y milicianos progubernamentales, en varios ataques suicidas del grupo yihadista Estado Islámico (EI) en las provincias iraquíes de Saladino (norte) y Al Anbar (oeste), informaron a Efe fuentes de seguridad.
Al menos 12 miembros del Ejército iraquí y de milicias aliadas murieron y otros 20 resultaron heridos en un ataque con tres coches bomba dirigidos contra posiciones de las fuerzas gubernamentales en la zona de Al Hariya y Al Asri, en la ciudad petrolera de Biyi, en la provincia de Saladino, al norte de Bagdad.
Una fuente de seguridad en la provincia de Saladino dijo a Efe que el ataque fue perpetrado por terroristas suicidas que conducían los vehículos cargados de explosivos.
Después del atentado, se registraron duros combates entre las fuerzas iraquíes y los yihadistas.
Por otra parte, las tropas iraquíes, apoyadas por milicianos progubernamentales, repelieron un ataque con cuatro coches bomba cerca de la ciudad de Ramadi, capital provincial de Al Anbar, según informó a Efe una fuente de seguridad local.
El atentado causó la muerte de 18 yihadistas y heridas a otros 36, sin que se conozca por el momento si hubo bajas en las filas de las fuerzas iraquíes.
La fuente agregó que cinco soldados fallecieron y otros 14 resultaron heridos por un ataque con coche bomba en la localidad de Sheij Masud, al este de Ramadi.
Irak afronta desde junio de 2014 una cruenta guerra contra el EI, que conquistó amplias zonas de su territorio y proclamó un califato en este país y en la vecina Siria.