La Semana Mayor, una celebración tradicional en la que por medio de diferentes actos religiosos, se evoca por parte de la Iglesia Católica la Pasión, Muerte y Resurrección del Hijo de Dios; es importante vivirla en paz consigo mismo, con los demás y con la naturaleza.
Según la religión católica, antes que el hombre, Dios creó lo invisible y lo visible: los cielos, los mares, los ríos y las especies, para su provecho y no para su destrucción; las celebraciones tradicionales de la Semana Mayor, de acuerdo con la cultura de cada región, han convertido en símbolo algunos elementos de fauna y flora que son altamente utilizados en esta época, degradando los ecosistemas.
“Por este motivo, desde las 33 Corporaciones Autónomas Regionales del país se hace un llamado para que en la Semana Santa se respete la biodiversidad del país y no se haga de estos días un calvario para lo ambiental”, advirtió Ramón Leal Leal, director Ejecutivo de la Asociación de Corporaciones Autónomas Regionales y de Desarrollo Sostenible, ASOCARS.
A sólo unos días de iniciar en firme la Semana Mayor, es clave advertir acerca del calvario que sufren varias especies de fauna y flora como las tortugas, iguanas, armadillo y la palma de cera del Quindío, debido a la utilización que todavía se hace de esta última para la celebración del Domingo de Ramos y la cual es el único hogar del loro orejiamarillo.
“Se le pide a la ciudadanía denunciar la extracción, transporte, movilización y venta de carne de iguana, armadillo, borugo páramo y venado, cuyo consumo aumenta en esta temporada ocasionando una depredación sobre dichas especies debido a la creencia del consumo de carne blanca durante los días santos”, argumentó el Director de ASOCARS, quien reconoció además, que año a año la iglesia Católica viene acompañando más este llamado de respeto hacia la naturaleza en las celebraciones de la Semana Mayor.
La carne y los huevos de las iguanas y las tortugas, por ejemplo, que son especies en vía de extinción, son altamente comercializados y consumidos en esta época, debido a la irracionalidad o falta de conciencia de algunos comercializadores, que inclusive le atribuyen poderes afrodisíacos.
“Quienes conozcan o sean testigos de este tipo de comercialización y depredación debe acudir ante las autoridades de su municipio o ciudad (Policía Ambiental, CAR, Secretaría Distrital de Ambiente) y denunciar –o informar- de los delitos contra el medio ambiente y la naturaleza.
Algunas recomendaciones para Semana Santa:
– No utilizar ramos de palma de cera, real, vino, cuesco, corozo de marrano, palma de estera y maracay.
– No estimule la comercialización de elementos de la flora y fauna silvestre.
– No compre o venda Helechos Macho o palma Boba, Líquenes, Parásitas, Orquídeas y Capote de Tierra, que tienen veda nacional.
– No compre o venda animales como el Águila Cuaresmera, el Gavilán de Alas Anchas, la Iguana y la Tortuga Icotea, cuya carne y huevos son utilizados con fines gastronómicos, que se promueven comercialmente como verdaderos “manjares”, durante la Semana Santa.
– Tampoco adquiera pescado por debajo de las tallas exigidas (tallas inferiores a lo normal, en estado de cría).