Según advirtió la Unidad de Gestión del Riesgo en Córdoba, las intensas lluvias y el inicio de la temporada de huracanes, que han desatado el desbordamiento de los ríos Sinú y San Jorge en el departamento, dejan hasta la fecha, aproximadamente 60 mil damnificados, principalmente en los municipios de San Pelayo, Lorica, Cereté, San Bernardo del Viento, Buenavista, Puerto Libertador y San José de Uré.
Las poblaciones rurales de Nariño, Palo de Agua y Los Gómez, en la margen izquierda de Lorica, serían unas de las más afectadas; este municipio declaró la Calamidad Pública por esta situación.
Fabián Lora, coordinador de la oficina de Gestión del Riesgo aseguró que se han dispuesto las medidas de mitigación en los puntos críticos de mayor impacto, a lo largo de la ribera del río Sinú con el fin de evitar mayores emergencias; así mismo se alertó a todos los Comités Municipales para que mantengan una comunicación constante con el nivel departamental y dispongan de los albergues temporales necesarios para resguardar a las familias afectadas.
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La Gobernación de Córdoba en coordinación con la Corporación Autónoma Regional de los Valles del Sinú y San Jorge (CVS) han destinado cerca de 80 mil costales de arena para controlar el desbordamiento del afluente en los municipios de Lorica, San Pelayo y Montería, principalmente. Se alertó que las lluvias permanecerán, al menos, por dos semanas más por lo que todos los municipios ribereños deben estar alertas.
Destacó que con ayuda del Sistema de Alertas Tempranas, se puede advertir a la población, con al menos 46 horas antes, sobre una inminente inundación.
En Montería, las autoridades permanecen en estado de Alistamiento Preventivo, con el fin de atender cualquier situación, además se monitorean los 27 puntos críticos a lo largo del río Sinú, para salvaguardar la seguridad de las poblaciones aledañas.